Super Hero!! [ID]

| 15 Años | Técnica | Shibusen | Heterosexual | Italiana | Femenino | Oujo-sama Estudiante |

» Descripción Física

De apariencia pequeña y delicada, una chica con una infancia un tanto enfermiza, cosa que probablemente afecto a su apariencia actual; de baja estatura (aproximadamente 1.58), delgada y "poco desarrollada" en cuanto a su feminidad se refiere, no es raro que algunas personas lleguen a pensar que posee menos edad de la que tiene realmente.
Tez pálida, podría llegar a considerarse de aspecto levemente enfermizo en ocasiones, fácil de marcar ya sea por contacto físico brusco o exposición prolongada al Sol, bastante delicada, más suave al tacto. Rostro de facciones finas, sus ojos son de color rosado, combinando de cierta forma con el tono claro de su piel. Sus caninos tienden a resaltar cuando sonríe o abre la boca, más sin llegar a darle una apariencia extraña o amenazante, simplemente dejándose ver como un pequeño colmillo, dependiendo también bastante del angulo desde donde se mire.
Cabello rubio, largo y ondulado, que suele peinar en dos largas trenzas, por el leve grosor de las mismas, resulta un poco difícil calcular el volumen real de su cabello si no se le ha visto con este suelto; aunque le es bastante cómodo peinarlo de esta forma, no es raro verle sin dichas trenzas cuando se encuentra en su hogar o en eventos formales. Caso contrario resultan un par de prendedores, en forma de grandes flores azul celeste, pues siempre se le vera con estos puestos, uno de cada costado de la cabeza, con obvias excepciones de rutina diaria (Dormir, baños, etc.) evita separarse de estos siempre, les tiene gran apego.
Estando en su hogar tiende a usar ropa casual aunque "fina, ropa típica de una "niña rica" o "de papi", cosa que le molesta de cierta manera, más suele guardarse para sí. Personalmente prefiere ropa más cómoda, por lo que la usa cada que tiene ocasión, siendo su conjunto favorito un abrigo verde, con capucha de borde afelpado, mallas con diseño florar en los costados y un par de botas rosadas con detalles blancos. No pone un pie en siquiera cerca de la escuela sin usar una mascara de gas de cabeza completa, pues prefiere mantener sus estudios como técnica "en cubierto" por motivos personales. También tiene una leve afición por diseñar, confeccionar y usar disfraces, específicamente de "superhéroe", más lo mantiene bien a raya y en secreto.

» Descripción Psicológica

Lo primero que cabe mencionar para describirle, es el desmesurado sentido de la justicia que posee y al cual parece aferrarse con absoluta terquedad. Heroína auto-proclamada de cualquier asunto que requiera de un mediador para llegar a la "justicia", en la postura firme de que cualquier malhechor va a terminar viéndose caras con ella tarde o temprano. Es de esperar entonces, que este comportamiento sea de por más, en extremo problemático, sumándole la política de la chica de "Actúa antes de hablar", logra conseguirse más problemas y mal entendidos de los que debería, aun así, su impulsividad no le molesta demasiado personalmente, por lo que suelen ser sus conocidos o personas a su alrededor los más afectados. Está de más decir que se trata de alguien bastante infantil, aun si ella no lo ve de esa forma, su afición descomunal por los superheroes y defensores de la justicia es digna de cualquier niño enajenado de unos cinco años, en extremo recomendable no argumentar con ella respecto al tema o pedirle información, pues puede pasar horas y horas hablando de héroes de capa roja con entusiasmo inigualable. Dueña de una determinación realmente aterradora, es poco común que le saquen una idea de la cabeza una vez que se decide por ello, un claro ejemplo es su insistencia por convertirse en técnica a pesar de la prohibición de su padre.

De naturaleza increíblemente valiente y temeraria, sin embargo, ha vivido prácticamente en una burbuja de atenciones toda su vida, por lo que son pocas las veces en las que se ha enfrentado a peligro real; la desventaja que esto conlleva es que no sabe medir riesgos o tomar precauciones, no ha tenido oportunidad alguna de sentir miedo real, por lo tanto tiende a tener problemas con los límites de lo audaz y lo estúpido. Es disciplinada y atenta a lo que le interesa, pues cuando algo lo hace, se mete de lleno en el asunto, tiene un enorme sentido de la responsabilidad, aun cuando se tratan de cosas que no le incumben.

Si bien solo es parte de un gran acto que sabe hacer desde pequeña, sabe comportarse como una señorita de ser necesario, aunque suele evitarlo como la peste. No le cuesta socializar o hablar con las personas, aunque sin notarlo llega a ser un tanto torpe al tratarlas, debido al poco contacto general que tiene con gente común y corriente, sin embargo, rara vez se da cuenta de que esta actuando de forma extraña o peculiar. Suele emocionarse con cosas simples (Tomar un autobús, comida rápida, puestos callejeros, máquinas expendedoras, etc.), pues muchas de ellas jamás ha tenido la oportunidad de experimentarlas.

» Historia

Muchas armas terminan en Shibusen simplemente por eso, por ser armas, aun si no está en sus planes terminar en dicha vocacional. Era el caso de cierto muchacho de cabellos oscuros y ojos teñidos de azul intenso. Leonardo Vitiello tenía catorce años cuando se enteró, por error, que era un arma. El descubrimiento le vino tan placentero como una cubetada de agua fría en pleno invierno. Su familia, bien posicionada y de recursos, investigo al respecto y finalmente optaron, sin pedir la opinión del muchacho, enviarlo a Shibusen para que lograse controlar los nuevos poderes que ahora gestaba. Solo iba a eso, a aprender a ser… esa cosa que era, los ideales del Shinigami, los cuentos de pelear por un bien común contra todo tipo de monstruos… le revolvían el estómago, ese no era el tipo de vida para un cobarde como él.

Como mencione, el pequeño Leo era un llorica de primera, por lo que vaya que sufrió al llegar a un colegio donde el objetivo principal es aprender a luchar contra… contra todo. Otros jóvenes de la institución no tardaron mucho en fijarlo como blanco para burlas, golpizas y abusos de todo tipo, el chico era un enclenque y se limitaba a llorar. Fue así que la conoció. Una chica que no dudo ni un segundo cuando vio a los matones haciendo de las suyas y se metió en medio de todo el asunto como si lo conociera de años, los golpes no tardaron en empezar y el pelinegro no hizo nada más que observarle, observar como recibía golpes que debía recibir él. Cuando la pelea termino la chica estaba bastante maltratada, pero erguida victoriosa frente a él, inflando el pecho con orgullo mientras él solo rompía en llanto.

Sí bien no fue la manera más digna de conocerse, una amistad empezó a forjarse entre ambos a partir de ese día y eventualmente terminaron siendo compañeros, aun si las diferencias entre ambos eran abrumadoras; una técnica con un alma rara y excepcional, que además creía en que podía lograr que el mundo fuese un lugar mejor emparejada con un llorón miedica que solo quería tener una vida tranquila y sin tener que escuchar nada sobre gente comiendo almas o brujas asesinando por mero placer. Sorprendentemente y aun si suena un poco raro, ambos hacían buen equipo.

Los años pasaron más rápido de lo que cualquiera de los dos hubiese pensado, si bien el pelinegro nunca llego a convertirse en Death Scythe, ambos se graduaron sin muchas complicaciones; con el tiempo su amistad y compañerismo, aun envueltos en una especie de historia cliché, terminó como algo más. Terminaron por formar una familia relativamente normal, pese a cierta inconformidad por parte de su mujer, esta termino aceptando dejar de lado la vida de técnica al menos unos años, para poder criar a su recién nacida de forma pacífica. Leo, por su parte se encargaba de negocios y relaciones políticas realmente influyentes e importantes, por lo que su nivel de vida era considerablemente elevado, más procuraba siempre tener tiempo para su esposa e hija.

Cuando su hija no tenía más de un año, recibieron una llamada de su alma mater, pidiendo su ayuda para cierta misión especializada, en la que un alma como la de la mujer, sería en extremo útil, y siendo que los técnicos con ese tipo de cualidad eran bastante contados, esperaban que ellos pudiesen dar una mano. Hubo una leve pelea, pero al final terminaron acudiendo, haciendo esa única expresión, dejando a la pequeña al cuidado de sus abuelos. Solo uno de ellos volvio a recogerla.

El hombre que regresó de dicho encargo estaba realmente destrozado, ¿Cómo se suponía que seguiría con su vida si la persona que era su vida ya no estaba? Impotencia, enojo, frustración pero sobre todo, un dolor intenso en su pecho… todo había pasado tan cerca de él y simplemente no había hecho nada… Asumió toda la responsabilidad de dejar a su pequeña sin madre, decidiendo ocultarle todo lo referente a técnicos, armas, monstruos y brujas, de su cuenta corria que la pequeña, quien era la viva imagen de su mujer, supiera sobre ese mundo plagado de peligro, no la perdería a ella también.

Así pues, la pequeña comenzó a crecer con vagos, casi nulos recuerdos de su madre, a quien se le parecía mucho… tal vez demasiado, para desgracia de su tutor. Empezó a una edad realmente temprana, la pequeña de rubios cabellos parecía soñar y fantasear con una sola cosa, héroes; defensores de la justicia vestidos con capas rojas y antifaces, siempre dispuestos a ayudar a los que lo necesitan, no se rinden, que siempre vencen a los tipos malos. La pequeña Vitiello tenía una afición enorme por dichos personajes que veía en comics, libros, películas y televisión.  Por supuesto que es normal que niños pequeños gusten de super héroes, ¿cierto? Su padre le restó importancia en su momento, hasta que noto que se convertía en un verdadero problema a medida que la pequeña de orbes rosados crecía.

La niña tenía muy pocas oportunidades de salir al aire libre, pues se enfermaba con facilidad preocupante, sin embargo, aprovechaba bastante bien las pocas oportunidades que tenía de salir… Ayudar mascotas perdidas, limpiar y recoger basura de parques y calles, defender a los niños que molestaban en la escuela, recuperar juguetes perdidos, todo tipo de tareas “heroicas” sencillas eran el pasatiempo de la rubia quien las hacia gustosa, usando una pequeña capa roja atada al cuello. Sí bien su padre no estaba demasiado de acuerdo con que anduviese por las calles jugueteando de esa forma y siempre mandaba servidumbre a vigilarla durante sus “misiones”, la cosa fue empeorando entre más crecía, siempre apuntando a un poco más, termino por intentar parar ladronzuelos reales, cosa que hubiese terminado en tragedia de no ser porque los enviados de su padre la detenían cada que trataba de escabullirse para hacerlo.

Una tarde aparentemente común, su padre fuera de casa como acostumbraba, se escuchó un grito desgarrador demasiado cerca de la casa, entre la conmocion de los empleados tratando de asegurarse que nada pasara en la propiedad y llamar a las oportunidades, la chica, capa en cuello, logro escabullirse para ir al lugar de donde se había originado el alarido, solo para encontrarse con un auténtico monstruo, enorme, de apariencia desagradable y ojos desorbitados, dando bufidos furicos. La reacción normal que cualquiera debería haber tenido era miedo, el impulso de escapar, pero la rubia no, una sonrisa retadora apareció en su rostro, y con ambas manos en la cintura reto a la imponente bestia, quien no tardo en arremeter contra ella. Hubiera terminado en una lamentable masacre de no ser porque varios metros antes de que esa cosa llegara a la rubia “lista” para enfrentarle, la bestia expiró su último aliento a manos de un corte que resultó fatal. Lo que vio después de eso, le fascino aún más que el enterarse de que existían monstruos reales que combatir, el arma del que había asesinado a la bestia tomo forma humana ante sus ojos. Fue entonces que los esfuerzos de su padre se fueron totalmente a la basura.

Las preguntas le cayeron al pobre hombre como un bombardeo fatal, al que no tuvo más remedio que responder, aunque ocultando siempre su posición y la de su madre; pero el golpe final, fue la insistencia feroz de la pequeña en asistir y convertirse en técnica… La determinación en su mirada, idéntica a la de su madre fue lo que le permitió negarse, aunque esto no desanimo a su hija para seguir insistiendo. Finalmente llegaron a un acuerdo… le permitiría vivir un tiempo en la ciudad cede de Shibusen, para que pudiese ver de cerca las criaturas singulares de la ciudad, siempre y cuando viviera la casa que él le conseguiría, y viviera con la servidumbre de su elección así como, claro, conseguirle un guardaespaldas para su cuidado personal, la chica aceptó, cruzando los dedos detrás de su espalda, al prometerle que solo iría a eso, mirar. Después de todo, un héroe no puede quedarse solo mirando.

» Habilidades

×Conducción de Longitud de Alma: A pesar de ser capaz de canalizar su longitud, muchas veces lo hace por error o sin control aparente, pues lo más probable es que sea capaz únicamente por el tamaño desbordante de su longitud.
×Alma Grigori: Aunque ella lo desconoce por completo, su alma tiene las características para ser llamada con este termino. Siendo un alma con forma rara, que se manifiesta como un "alma alada" en términos simples. Dándole la habilidad natural de esta de manifestar dichas "alas" en caso de tener la habilidad suficiente y los medios correctos para canalizarla (Un arma o magia especifica).
×Es bastante ágil y buena escabulléndose.

» Otros Datos

× Le gusta mucho sacar fotografías.
× Sabe montar a caballo bastante bien.
× En su hogar, Italia, tiene una Yegua llamada Morwen.
× La única imagen que ha visto jamás de su madre, es una foto bastante desgastada de su boda.
× Los pasadores de flor que usa, fueron un regalo de la primera persona que ayudo llamándose así misma como "heroína".
× Es bastante buena cosiendo, tejiendo, confeccionando, etc. usa esta "habilidad" para hacer trajes o capas. (Le hizo una a Morwen)
× Tiene una colección enorme de cómics, figuras, posters, e infinidad de productos de super héroes, sin embargo, tiende a avergonzarle el tamaño de la misma, por lo que la mantiene oculta en su armario.
× Su héroe favorito es Batman.
× Sin embargo, tiene un oso de peluche con una pequeña capa roja que ella misma le hizo, llamado Clark.
× Galletas y eso, meh.
×Chiaya Misono - Rolling☆Girls