La entrada a la Escuela Vocacional para Técnicos y Armas del Shinigami consta de una gran explanada en la parte de enfrente, regularmente con gente mirando el panorama desde las orillas o conversando por ahí, incluso en ocasiones peleas entre estudiantes se dan acabo en este lugar. Claro, para llegar hasta aquí tienes que subir las enormes escaleras, muchos nuevos estudiantes se quejan de estas, pero no te preocupes, tras subirlas cada mañana te terminas acostumbrando... tal vez.

Al ser un edificio tan grande, es obvio que la escuela cuente con gran cantidad de pasillos y corredores, estos llegan a pasar por laberintos para aquellos que no conocen del todo el colegio, pero los estudiantes y maestros que los frecuentan regularmente parecen moverse por ahí sin dificultad alguna.

Los salones son amplios y bien iluminados, todas las clases, sean para técnicos, armas o mixtas se imparten regularmente en estos, la mayoría tienen una forma de auditorio, pero otros tantos están adecuados para sus respectivas materias.

Realmente concurrida durante el tiempo libre entre clases, a pesar de ser amplia y contar con varias mesas, en ocasiones se llega a llenar por completo. Ofrece diariamente una gran cantidad de platillos a los estudiantes, aunque también venden comida empaquetada y es posible encontrar un par de maquinas expendedoras. No hay excusas para pasar hambre en Shibusen.

La biblioteca del Shibusen es de fama mundial gracias a su inmensidad. Desde enormes libros de texto y grandes enciclopedias hasta tomos de manga y comics, es casi imposible que el libro que quieres no este en alguno de estos estantes, claro, primero tendrías que encontrarlo, pues el orden no es la mejor cualidad del recinto. Existen también secciones prohibidas para los alumnos comunes, se rumorea que el castigo es realmente severo para quien se encuentre husmeando en las zonas restringidas.

Un tanto recurrida gracias al ambiente escolar en Shibusen, las riñas entre estudiantes siempre dan trabajo a los encargados. Aunque parece una enfermería escolar común y corriente, esta bastante especializada, tratan desde dolores de estomago, hasta heridas de combate serias.

Los balcones de Shibusen tienen una vista realmente privilegiada de la ciudad de los muertos, después de todo, la vocacional es el edificio más alto de Death City y si no resulta de por si obvio, los balcones lo comprueban sin lugar a dudas, la vista es realmente hermosa, pero es bien sabido que algunos estudiantes pasan horas de clase aquí, no precisamente por la vista, si no por que al parecer, también son un buen escondite durante horas de clase.

Un cuarto un tanto... Curioso. Puedes encontrar al director aquí siempre que lo necesites, es raro cuando el Shinigami no se encuentra en este lugar, si te llaman al salón, procura acudir de inmediato, pues debe ser importante. El número del espejo es 42-42-564, linea directa con el Dios de los Muertos.

Siendo que tanto el alumnado como el cuerpo docente de Shibusen proviene de todas partes del mundo, la escuela tiene a su disposición dormitorios para quienes no cuenten con un hogar en Death City y los necesiten, estos no tienen costo alguno y se encuentran en edificios aledaños al colegio. Son dos edificios separados por genero.

Un salón realmente grande, amplio y alto, aquí se celebran eventos como la fiesta por el aniversario del colegio, aunque de vez en cuando se le dan otros usos. Regularmente el salón esta vacío, a excepción de algunos materiales en una de las esquinas.

El lugar favorito de los musculitos, el infierno para los cerebritos, para otros, simplemente un aula más. Aquí es donde se encuentra todo el espacio necesario para tener un físico apropiado a la hora de cazar kishins, todo estudiante debería mínimo pasar por este lugar dos horas al día... o por lo menos ese es el ideal. Aquí encontrarás también toda la indumentaria necesaria, desde pesas, hasta canchas para correr, varas para saltar, sacos de boxeo, en fin, no te quejarás de que no hay nada que encaje con tu estilo.

Una zona prohibida para los estudiantes, no solo por su seguridad, pues bajar al subterráneo es prácticamente seguro que te pierdas, sino por que se guardan muchas más cosas aquí de las que probablemente deberían estar bajo una escuela. Como es obvio, un montón de rumores van de boca en boca respecto a lo que hay allí abajo, algunos por supuesto, más disparatados que otros.